martes, agosto 29, 2006

"El poeta"

Ese hombre de cabellera dispersa, no es otra cosa
que el exhumador de un mundo antes irredento.

Ha aprendido, sufriendo,
fórmulas mágicas que los otros desconocen: conjuros para evocar
y recrear danzas interiores.
Razas sordomudas, perdidas en sus parajes profundos, cobran voz
bruscamente y, desde el valle dormido bajo la niebla, ese coral
suena iluminando regiones desoladas o magnificas.
Así, hasta que toda la tierra se convierte en eco.



Juan Eduardo Cirlot

miércoles, agosto 23, 2006

La maldición de mi realidad


Éste escrito es un regalo que me hizo una pequeña gran amiga mía; decidí subirlo por dos cosas:
1. Escribe increíble, por ende, encontré que era muy necesario mostrar su talento.
2. Por que es inspirado en mí.
Espero que no le moleste que lo suba, y aunque los "palos" me lleguen profundo, es digno de ser expuesto.
Su título original es otro, pero demasiado obvio, así que prefiero omitirlo.


"Solo en la soledad
Si busco , no estarás
Si encuentro , de nada servirá
Mi don no se compara con el tuyo...
Te dices artista pero solo tomas un lápiz y trazas líneas
Yo tomo un lápiz y convierto esta historia llena de llanto y melancolía...
En algo que jamás se olvidaría
Miro hacia atrás y no te veo pasa
Miro hacia adelante y ahí estás
Tratando de plagiar
Saca ideas propias...tienes que contar
Trata de investigar..sobre lo que piensan los demás
No eres el unció del planeta...
Tampoco eres bueno juzgando letras
Esta historia es inspiración
Pero que pasa cuando se acaba el don?
No queda más que esperar a que algo pueda pasar
Sabemos que está por terminar...
Pero nos gusta llevarnos mal
Será que así nos entendemos?
O simplemente nos queremos?
Lágrimas son la primera señal
Ya he recibido más de un puñal
Tú dices "no puedo hacer nada"
Yo digo "¿por qué guardas secretos si te puedes oirá ti mismo?"
El silencio deprime...Las paredes hablan..pero seguimos callados
No puedo hacer nada si me tienes aquí
No puedo cambiar nada
No hemos terminado..queda mucho por seguir...
No trates de evadir que de nada va a servir
Las metas son difíciles de lograr..si no te llegas a enamorar
El cielo azul...no cambia como eres..
Lo ves gris pero igual dices "ay! No lo puedo cambiar, así está acá"
Tu cura es sólo recibir antes de reclamar
Lo siento no te puedo cambiar!...sólo tú lo puedes lograr..si es lo que quieres más
Dices que escuchas..pero te haz escuchado a ti?
No me vas a cambiar..con tu sólo pensar.

No es necesario vernos agarrados de la mano,
Quieres ver lo que esto pudo ser? "

Por... Kata.





martes, agosto 22, 2006

Errante

El Silencio se apodera de mí en una esquina de la aula, en mi realidad apartada al resto, errante en pensamientos. En Frente, un hombre habla con grandilocuencia, expresando sus conocimientos, los cuales ha traspasado de generaciones en generaciones, cual mago sus pociones y conjuros a los novatos en artes mágicas; todos simulan prestar atención, asintiendo como hipnotizados frente a sus palabras.
El tiempo transcurre al ritmo de la aguja del reloj y mi mente se envuelve entre melodías inexistentes para los demás, pero significantes para mí ; y ahí los veo a todos atrapados en una realidad colectiva, pero que ninguno logra dimensionar.
Observo por la ventana, sintiendo que ese más allá es una forma de evacuación a este encierro invisible e intangible, ¿Y por qué no me pongo de pie y me voy?, ¿Qué es lo que me retiene?, ¿Personas?, ¿Situaciones?. La puerta está ahí, y no pretende moverse, alucino que me dice: "¿Por qué sigues aquí? ".
Extrañamente comienzo a sentirme asfixiada, ¡Necesito salir!. ¿Qué carajo hago aquí?; mi entorno comienza a dar vueltas como ruleta, las palabras se trasnforman en gritos sin sentido, empiezo a sentirme en la disyuntiva dicotómica de la esclavitud social o la libertad individual, pero me detengo en mi divagación existencial y me digo a mí misma "Jamás he sido esclava de nada, y esta no será la excepción", tomó mis cosas y me voy; quedando como último recuerdo, el rostro de mis más cercanos preguntándose el por qué de mi huída.
Comienzo a caminar deseperada buscando un refugio para mis palabras, mis locos pensamientos y melancólicos recuerdos; y aquí estoy ... desahogándome de la mejor forma, sintiéndome aliviada y felizmente sola.
Ahora recuerdo una interrogante que oí hace un tiempo atrás: "¿Qué es la libertad?"; hoy conseguí mi respuesta a aquella pregunta; libertad es ser Errante (textual o metafórico) ... ser fiel a tus pensamientos ambulantes y mantener un paso firme . Eso es ser libre, y yo comprobé que afortunadamente lo soy. Ahora me siento mejor.


Constanza A. Bunbury.

domingo, agosto 20, 2006

Freak Show


"Por que una reunión de Freak's es forzada"- cito a Iván Ferreiro, uno de los invitados a la última gira que realizó el grandísimo poeta-musico-compositor-cantante, Enrique Bunbury, que lo tituló "Freak Show".
No me referiré específicamente a Bunbury, ni a su tour, pero sí fue la que me inspiró- y que se ha convertido en mi referente desde hace un tiempo- a escribir sobre esto.
¿Qué es un o una Freak?. Este término en sí viene del inglés, que significa raro , pero adaptándolo a nuestro coloquio, ¿A qué y/o quién se le considera Freak?.
Como dice Bunbury: "Para mí el resto es Freak, pero como a los demás les molesta que los catalogen de "freak"; no me molesta decir que yo soy el raro".
Personalmente también me encuentro Rara y no me molesta para nada, pero como dice el texto de Paulo Coelho (Veronika decide morir) : "Normal se considera algo que está aprobado por una mayoría, y nadie se cuestiona el por qué de esa cosa... y quién lo hace, pasa a ser el loco, el raro". Entonces ¿Quién es realmente el freak en todo esto?, ¿los obedientes ortodoxos o los díscolos heterodoxos?...
En la década del circo de los 50', se le consideraba "freak" (valga la repetición del término) a todos aquellos personajes- de aquel mundo tan errante y particular- que tuvieran alguna peculiaridad física: mujeres barbudas, enanos, siameses, etc. Un ejemplo claro de aquello, se presenta en el film de 1980 "El hombre elefante" - basado en la vida de Joseph Carey Merrick- donde se muestra claramente los tipos de deformaciones en los personajes circenses, y el manifiesto rechazo por parte de los "normales", quienes disfrutaban de las constante burlas y maltratos hacia los raros.
Si trasladamos aquello a nuestra época, podemos decir que todo lo que se salga de los parámetros de lo "normal", se le considera despreciablemente freak. Es cosa de caminar por la calle y ver por ejemplo a un punk, un hippie, un ciego, un inválido, entre otros; las miradas son constantes y los comentarios sin fundamentos: "Mira ese pelo, esa ropa... éste es raro".
Y no hablo de manera vanal; me refiero a esto con juicio, por que lo he vivido en carne propia, quienes me conocen lo saben, - por mi pseudo extravagancia de vestir, actuar y pensar - y donde perfectamente podría ponerme en la postura opuesta: "Los demás son los raros". Pero para que voy andar con esas andanzas, Yo soy la freak en la realidad colectiva (como muchos otros), y a mucha honra lo reconozco.
En mi mundo puedo ser considerada "normal", por que en la realidad que me creo, que pienso, imagino, sueño, alucino vivenciar, todo- absolutamente todo- es considerado un Freak Show de circo... y eso es lo que la hace más divertida... la constante rareza... una bella utopía repleta de particularidad.

Un dato a parte pero ligado a esto: Vean el "Freak show, la película" de Enrique Bunbury, dos horas cinco minutos inolvidables; espectáculos así hacen falta en este mundo. Apuesten por el rock n' roll .

Constanza A. Bunbury.

viernes, agosto 18, 2006

Por que soy el rey del mundo


Yo... Yo... Yo soy el que siempre saca la cara por todo y por todos. ¿Qué les parece?, me siento seguro de mí o por lo menos lo intento aparentar... a veces me parezco tan afortunado, tan agradecido y a la vez tan desgraciado, preguntándole a Dios Padre ¿Por qué todos los talentos me los otorgaste a mí?. No crean que es tan lindo ser siempre el nombrado, el convocado, el elegido, el "Artista"... Me siento ahogado, asfixiado de tener que explotarme para el decir de los demás.
Quisiera ser muchas veces apaciguado en mi actuar, pasar desaprecibido frente al resto, pero mi esencia es otra. ¡Y no es que me guste pasar a llevar a los demás!, ¿Qué culpa tengo de destacar más?.
Soy el precursor del librepensamiento, de la igualdad, la honestidad, la humildad, y por sobre todo el buen decir... Más derecho no puedo ser. Creo que soy bastante bastardo y fúltil en la realidad, y todos me quieren por mis talentos... ¡Qué sería de mí sin ellos! .
Mi aspecto no es nada maravilloso, al contrario, soy un ente mutante de planetas aún no descubiertos.
Cada mañana al despertar y lavarme la cara me pregunto ¿Mis talentos son el reemplazo de mi físico?... ¡Y no es que me importe las apariencias!, es sólo una forma de burlarme de mí mismo; no hay mejor cosa para romper monotonías que reír de lo irónico de la vida.
Miedo a la ridiculez jamás he sentido; es parte de mi pasión ridiculizar y liviandar todo... ¡Eso es mi sanación!...
Realmente soy un bastardo envuelto en talentos, una basura dicotómica humana con brazos y piernas.
Pero a pesar del 80% de mi mala existencia, soy el rey de mi propio mundo, uno que creé y que nadie entiende... por que nadie es tan freak como yo... soy diferente y siempre lo he sido ¿Y qué importa? ; jamás intento impresionar, pero sin querer lo hago... ¿Por qué? Por mi arte ¿no creen?. Bendita vida ¡Gracias por dejarme una misera parte de belleza en mí!...
Realmente Gracias.


C.A. Bunbury

sábado, agosto 12, 2006

As de Diferencia



Cada mañana al abrir mis ojos, lo primero que observo es a mí en una esquina de mi habitación, mirando un punto fijo de la pared, y jamás me he atrevido a interrumpirme. Luego voy al baño, lavo mi cara y me observo al espejo; ahi estoy otra vez, con mi cara mónotona y pálida, pero igual así me sonrío y digo: "Cada día amences un grado mejor".
Ya vestido, me dirijo a la cocina para tomar desayuno; pero al pasar por el living, me observo sentado con cara de aburrido, mientras hago zapping , ya que a esa hora la televisión no es muy divertida; así que opto a hacerme compañía junto a una taza de café y una tostada.
Al estar sentado frente a mí, comienzo a buscar algún tema de conversación, pero da la impresión de que en ese aspecto no congenio conmigo mismo y en vez de buscar solución, me pongo de pie, tomo mis cosas y me voy rumbo a la universidad.
Camino rumbo a comenzar un día más de trabajos y estudio, pero algo me comienza a llamar la atención; no me podía ver en ningun lugar... las personas eran muy diferentes a mí (pero iguales entre ellos), se vestían distinto, hablaba diferente y se interesaban por cosas que a mi no me llaman la atención.

Era como si vivieran regidos por el tiempo, corrían por alcanzar una locomoción y no observaban a quién estaban a su lado; me pregunté a mí mismo: " Si yo no esquivo a las personas, ¿Ellas jamás se harán un lado para evitar golpearse?".
Seguí caminando hacia mi recinto académico y mientras me dirigía a una de las salas, pude notar a alguien sentado en una de las bancas que llamó mi atención ya que era diferente a lo que había observado hasta ahora, logré diferenciar que era una mujer que estaba concentradamente dibujando, pero imágenes de su mente, ya que no hubo minuto que levantara la cabeza para observar su alrededor. Luego miré a frente de ella, y ahí estaba yo sentado en una banca, en la misma posición de ella, pero escribiendo; quedé impresionado, parecía un espejo que reflejaba a dos personas diferentes en aspecto, pero iguales en pensamiento. ¿Pero Por qué no lográbamos percatarnos de nuestra similutd, si estábamos tan cerca?.
Por un impulso sentí que debía reaccionar; primero fui donde mí y comencé a hablarme, pero no me escuchaba; seguía concetrado escribiendo, asi que preferí ir donde la muchacha. Ella me miró de reojo y continuó dibujando. De repente miré a mi alrededor y las personas eran todas iguales, el mismo aspecto, se detenían a observar lo mismo; lo que produjo que notara por primera vez que yo era diferente y que la mujer que dibujaba también lo era, pero igual así no lográbamos vernos. ¿Por qué? ¿Qué sucedía?; no pude responderme, haciendo que me quedara toda la tarde observandónos, buscando la respuesta a esas dudas y a la vez notando que cuando menos lo piensas, puedes encontrar a alguien similar y ni siquiera lo notas...

Constanza A. Bunbury

domingo, agosto 06, 2006

Expulsada del país de las maravillas


Desperté de un largo y grato sueño, los cuales suelo transitar la mayor parte de mi vida paralela; donde comparto con duendes, escalo montañas de dulces y suelo tener extensas conversaciones con minotauros.
Pero este despertar fue diferente... en este lugar suelo caracterizarme mucho por mi genio bastante peculiar, bastante intrusa a veces o callada otras. A lo largo de los años he tenido que aprender a guardarme mis opiniones, sobre todo cuando la reina de corazones y el rey suelen tener la palabra... que es en la mayoría de las ocasiones.
Hoy por primera vez me sentí cruel; no mala, hiriente, ni nada por el estilo, sino cruel. Como después de todos mis despertares, comencé a caminar por los bosques, pero mi genio no era del todo bueno. De repente tropecé con el conejo relojero, donde me dijo con su grave voz -¡Cuidado! Casi me pisas- y a lo que respondí con furia- Fíjate por donde caminas entonces. Y continúe, pero de pronto me volví conciente de lo que había dicho; me volteé para ver a conejo, pero ya era tarde para pedir disculpas y seguí mi camino.

Después de una largo trayecto, llegué al palacio de cartas, ya que la Reina me había citado para algo importante. Los guardias apenas me vieron abrieron el paso y me indicaron para donde tenía que ir. Al llegar pude notar a la Reina y el Rey sentados en su trono, con rostro de acongojo; pero como era habitual, la reina de corazones se mantenía más firme.
- Te hemos citado por que hay una noticia que debemos comunicarte- dijo la Reina; yo no me asombré mucho, ya que de un tiempo a esta parte, en este sitio muchas cosas habían cambiado; además mientras caminaba había escuchado rumores.
- El reino se está desmorodando de a poco, las cartas están siendo voladas por el viento, el tiempo a comenzado a regir nuestros días... - Y así continuó el Rey diciendo un sin fin de horrores. Como hubiera sido en otra oportunidad, quizás hubiera buscado soluciones, pero esta vez fue diferente. Con rabia y pena a la vez respondí con un tono firme.
- ¡De incómodo, ya pasa a ser indigno!, No saben gobernar su propio reino ¿y me cuentan sus problemas a mí?... Estoy cansada de siempre callar y tragarme los problemas de una realidad que yo no busqué.
En ese instante, ambos me miraron, pero no con dejo de reto, sino de pena...
- No seas mal agradecida- dijo la reina, mientras el rey se tomaba la cabeza de asombro- Siempre haz tenido lo que quieres en este lugar, intentamos siempre tener todo en orden; todos pasan por malos momentos y nosotros no seríamos la excepción. Lástima que pienses así, pero es lo que te tocó vivir... - terminó la reina de corazones, con lágrimas en los ojos.
En ese instante me sentí desmoronada, había sido, sin querer, hiriente. Sin saber que decir, me fue con un acongojo profundo.
Caminé y caminé hasta cansarme, a lo lejos pude ver la salida del país de las maravillas. Ahora la decisión estaba en mis manos, y por primera vez me sentí débil, pequeña, sin saber que hacer... ¿Qué sería de mí desde ahora?, ni yo misma me podía responder esa pregunta...

por Constanza A. Bunbury.